Estocolmo es la capital y ciudad más grande de Suecia. La ciudad se asienta sobre 14 islas entre las cuales se habilita el paso a través de 57 puentes sobre sus respectivos canales. El agua es un elemento omnipresente en la ciudad, lo que la hace plenamente merecedora de la calificación que se la otorga como la "Venecia del Norte".
Lo primero que a uno le llama la atención cuando visita Estocolmo, especialmente en invierno, y más concretamente un 7 Febrero, como este de 2009, es ver como el cielo empieza a atardecer a partir del medio día de manera que a las 15:30h se hace casi de noche.
Fue a esta hora más o menos cuando llegué al Hotel Amaranten, en la calle Kungsholmsgatan, sita en el barrio de Kungsholmen, al Oeste de la ciudad. No tardé mucho en soltar las maletas en la habitación y bajar a dar un paseo para efectuar una primera toma de contacto con la ciudad.
Siguiendo por Kungsholmsgatan hacia el centro, y tras pasar por uno de los bonitos puente, de los centenares que se pueden encontrar en la ciudad, habilitando así el paso entre las docenas de islas y canales sobre los que se asienta, pronto podemos llegar a uno de los puntos álgidos de la ciudad, T-Centralen, la estación central de metro y ferrocarril de ciudad.
Cabe destacar que Estocolmo es una ciudad de algo más de un millón de habitantes (unas cuatro veces menos que Madrid), lo que significa que las infraestructuras de transportes están dimensionadas para atender las necesidades de este volumen de población, y por tanto encontraremos que la red de transportes, ferrocarril y metro es cuatro veces más pequeña que la de Madrid, en el metro hay cuatro veces menos gente (siempre encuentras sitio para sentarte), tardas cuatro veces menos en llegar a cualquier sitio, es una ciudad cuatro veces menos estresante, y que ofrece una calidad de vida cuatro veces superior. Y eso se percibe en cuanto uno llega, se ve que es una ciudad relativamente pequeña y acogedora.
Desde T-Centralen podemos continuar por la gran avenida de Klarabergsgatan que nos hará pasar junto a la iglesia de Klara Kyrkan, cuya peculiar torre afilada es uno de los edificios más vistosos y visibles de la ciudad.
Pronto llegamos a otras de las plazas más céntricas y vistosas de la ciudad, Sergels Torg, con su curiosa torre acristalada.
Aquí podemos tomar la calle de Drottninggatan, una calle eminentemente comercial que poco a poco se va estrechando a medida que nos adentra en el centro de la ciudad. Esta calle nos deja en el puente de Riksbron, que da acceso al islote de Helgeandsholmen, donde se encuentra el Parlamento Sueco (Sveriges Riksdag). No son todavía las 17:00h y ya está bien entrada la noche. La temperatura es baja pero muy llevadera, a pesar de que sobre el puente se ven numerosos témpanos de hielo flotando sobre el agua.
Este es el punto de entrada a Gamla Stan, el casco histórico de la ciudad. Es de noche y no es el mejor momento para apreciar la belleza del barrio, por lo que continué caminando hasta salir a Skeppsbrom, una avenida que discurre por la orilla Este del islote de Gamla-Stam poniendo en comunicación este con los barrios del norte y sur de la ciudad. El frío es ya notable pero soportable, y se disfruta del paseo observando las luces de la ciudad asomándose a la ribera del mar así como las numerosas embarcaciones amarradas en todo lo largo de esta avenida.
Siguiendo hacia el sur pronto llegamos a otro punto emblemático de la ciudad, la zona de Slussen, otro de los entramados de comunicación de la ciudad. Esta palabra significa "cerrojo" y literalmente el barrio hace justicia a su nombre ya que aquí se encuentran unas compuertas que regulan el paso de agua entre el Lago Mälaren y el Mar Báltico (dos cuerpos de agua a distinto nivel).
El termómetro de la visible torre de Slussen marca 0º a las 17:31h, con noche ya muy cerrada desde hace más de una hora, y los témpanos de hielo así se acumulan junto a la orilla del Mar. Es absolutamente espectacular y muy llamativo para un español vivir este tipo de experiencias.
Habiendo llegado hasta aquí, me di por satisfecho con esta toma de contacto con la ciudad y me volví hacia el hotel por la calle Stora Nygatan y cruzando el puente de Vasabron, que nos devuelve muy rápido a la zona de T-Centralen, acabando así el paseo de toma de contacto con la ciudad.
El Domingo, 8 de Febrero de 2009, amaneció nublado en la capital sueca. Comencé la mañana paseando por la calle Hantverkargatan, desde la que se puede ver en todo momento la torre del Ayuntamiento de la ciudad.
Muy pronto llegamos a las inmediaciones de este característico edificio visible desde muchos puntos de la ciudad.
En el recinto del ayuntamiento está a orillas de uno de los múltiples canales de la ciudad, donde existe un agradable jardincito y un pequeño muelle, que a esta hora de la mañana, las 10:20h, presentaba algunas capas de hielo con témpanos que flotaban tranquilamente entre las embarcaciones amarradas. Desde aquí se pueden disfrutar unas extraordinarias vistas hacia el centro de la ciudad.
La torre del ayuntamiento es extraordinariamente peculiar, ya que está rematada con vistosos ornamento dorados de los que destacan, en lo alto de la torre, la composición de las tres coronas, emblema de Suecia. Es posible visitar la torre y obtener buenas panorámicas de la ciudad desde la parte superior.
Continuamos el paseo cruzando el puente de Stadshusbron, y accedemos a una pequeña placita junto a T-Centralen, donde existe un pequeño nudo de carreteras y ferrocarril, y donde encontramos un par de hoteles de lujo de la ciudad, el Hilton y el Sheraton. Ahora nos dirigimos hacia el centro cruzando por el puente de Centralbron, que nos permite disfrutar de una buena panorámica del Parlamento Sueco.
Si nos acercamos al Parlamento, tras cruzar unos espectaculares arcos presidiendo el puente de Stallbrom, entramos en Gamla Stan, el casco histórico de Estocolmo, primer asentamiento de población sobre el islote más céntrico y protegido de la geografía de la ciudad.
A la entrada de Gamla Stan, vemos a nuestra derecha una de las puerta de entrada al Parlamento.
Y a nuestra izquierda el Palacio Real. Al otro lado del Palacio se encuentra la Catedral, StorKyrka.
Proseguimos por Vasterlanggatan, calle peatonal y eminentemente comercial.
Nos adentramos más y más en el barrio viejo, haciéndose palpable su carácter medieval de estrechas calles y oscuros pasadizos que nos traen a la mente recuerdos de ciudades que bien conocemos, como Toledo.
Un lugar especialmente bello de Gamla Stan es la plaza de Stortorget, en el punto más alto de la isla, centro comercial y de justicia de la ciudad medieval. La plaza está rodeada de bellas casas de hastíales de los s.XVII y XVIII.
También se encuentra el emblemático edificio de la Academia Sueca, donde se deciden cada año los ganadores de los premios Nóbel.
Si seguimos bajando por Vasterlanggatan llegamos a la Plaza de Järntorget, muy peculiar por la enorme fuente de bronce que se haya en el centro de la misma. Desde esta plaza se llega a Marten Trotzigs Grand la calle más estrecha y curiosa de Estocolmo, con solo 90 cm de ancho, y una escalera de 6 escalones.
La plaza nos da acceso a Skeppsbron, una de las arterias de la ciudad, y más concretamente muy cerca de Slussen, otro de los nudos de comunicaciones de la ciudad, y que hoy por el día presentaba un aspecto más vistoso que el día anterior por la noche.
Tome Skeppsbron en dirección Norte.
El paseo por esta avenida brinda la oportunidad de disfrutar de fantásticas vistas, especialmente al islote de Skeppsholmen, donde destaca amarrado en su orilla el Af Chapman, el barco albergue probablemente más famoso de Europa, hasta tal punto que es muy difícil conseguir plaza, a no ser que se solicite con gran antelación.
Si continuamos avanzando, tendremos también una excelente vista del National Museet.
Y pasaremos junto a la Catedral y a la entrada principal del Palacio Real, donde se puede disfrutar los domingos a medio día e la ceremonia del cambio de guardia, y muy especialmente en verano, época en que se celebra de manera más vistosa.
Cruzando el puente de Strömbron saldremos a unos bonitos jardines donde se levanta la llamativa iglesia de Jakobs Kyrka.
Y volviendo la vista atrás disfrutaremos de una preciosa panorámica de la ciudad.
Nos dirigimos ahora hacia el National Museet para continuar caminado por el puente de Skeppsholmsbron, que da acceso al islote de Skeppsholmen. Desde el puente se disfrutan así mismo de unas espectaculares vistas hacia los peculiares edificios y decenas de embarcaciones amarradas junto ala avenida de Strandvägen.
Este islote es una de las zonas más tranquilas de la ciudad, y permite disfrutar de vistas extraordinarias hacia todos los barrios de la ciudad. Fue una antigua base naval en la que hoy se han asentado numerosos museos y curiosas exposiciones.
Salimos de Skeppsholmen y continuamos ahora el paseo por el Bulevar de Strandvägen, sin duda la zona más aristocrática de Estocolmo, en el Barrio de Östermalm.
Podremos disfrutar de un agradable paseo entre el muelle y las monumentales casas que se levanta a lo largo de toda esta avenida.
Pronto llegaremos al enorme parque sito en el islote de Djurgärden, tras atravesar el puente de Djurgärsbron. Lo primero que nos encontramos al llegar es el imponente Museo Nórdico, dedicado a la cultura e historia Sueca desde la época Modernista hasta la actualidad.
Muy cerca del museo es interesante no perder la ocasión de visitar un pequeño cementerio, muy peculiar por la antigüedad y singularidad de sus tumbas. Es muy impactante ver como se levantan estás lápidas entre balsas de agua y hielo.
Muy cerca se encuentra también el Museo Vasa, donde se conserva en excelente estado de conservación el único navío del siglo XVII que ha perdurado hasta nuestros días, El Vasa, mandado construir por el Rey Gustaf Adolf II, fue el mayor navío de guerra construido hasta la fecha. El Vasa naufragó en su viaje inaugural, el domingo 10 de agosto de 1628, en el puerto de Estocolmo debido a un fatal error de diseño que redundó en la construcción de una embarcación de proporciones inviables para la navegación. El barco fue rescatado el 24 de abril de 1961 y se encuentra expuesto en el museo homónimo en Estocolmo.
Y con la recomendable visita al Museo Vasa, di por finalizada esta excepcional jornada de visita a la singular ciudad de Estocolmo, ciudad que a buen seguro, no defraudará a ningún visitante que desee pasar unas inolvidables vacaciones en este rincón de Europa.
Para más información:
http://es.wikipedia.org/wiki/Estocolmo
http://elviajero.elpais.com/articulo/viajero/Estocolmo/mirando/sol/elppor/20090331elpepuvia_2/Tes
No hay comentarios:
Publicar un comentario