Llegué al punto de encuentro (Plaza del Ayuntamiento de Toledo), junto a Fernando (Ratone) a las 12:30h, pasando media hora del horario previsto y habiendo perdido a Concha (su mujer) por el camino. Así que ella fue el primer "tesoro" de la mañana a buscar en el casco de Toledo.
Allí nos esperaban los equipos organizadores: Alamostrail, Universo Arácnido y Bololand. Nos proporcionaron las correspondientes acreditaciones e instrucciones del juego para hoy (un material muy trabajado), así como algún detalle proporcionado por GARMIN, que esponsorizó el evento. Tras charlar un rato con ellos comenzamos la búsqueda. Básicamente se trataba de realizar todas las estaciones del cache "Toledo, Ciudad de Leyenda". http://www.geocaching.com/seek/cache_details.aspx?guid=30a36fea-cb9c-4ef8-8b7b-8c9835bc835b
A los pocos minutos nos empezó a llover y, dadas las horas que eran, vimos más interesante homenajearnos con contundencia a base a cañas y tapas, para acabar con unos postres exquisitos y unos pacharanes en Alfileritos 21. La verdad que Toledo está mejorando sustancialmente la oferta hostelera en los últimos años, todos los establecimientos están muy elegantes, decorados con mucho gusto, y atención y calidad bien cuidada. Así que en nuestro particular evento mañanero consistió en recorrernos todos los bares del centro, y la verdad que lo pasamos estupendamente. Por cierto, encontramos todos ellos sin necesidad de usar el GPS.
Después de comer bajamos a por el cache ubicado en las inmediaciones de lo que alguna vez pudo ser el "Artificio de Juanelo".
(Para más información: http://www.geocaching.com/seek/cache_details.aspx?guid=b6c728ee-f2c5-4fed-a8a9-28ef5df7c547 )
Las coordenadas nos mandaban insistentemente a más de 20 metros de la posición del cache y no habíamos visto la foto spoiler, así que como se estaba haciendo de noche, decidimos llamar a Gonzalo (Alamostrail) para clarificar la posición. La zona, al lado del Puente de Alcántara, estaba bonita y con cierto aire tétrico, dado el aspecto de las numerosas ruínas que allí perduran, mientras iba cayendo la noche. Debió ser absolutamente impresionante ver funcionar este artefacto elevando las aguas del Tajo a tantos metros de altura.
Tras la cena y culminación del brillante cache, el nucleo duro de frikismo geocacher no quiso dejar pasar la oportunidad de conseguir el cache memorial, a pesar de hostil entorno en el que se encontraba para las horas que eran. Así que, linterna en mano, una primera avanzacilla compuesta por Cherokeex, ppcampillo, Santi y yo llegamos al peculiar lugar e inauguramos el libro de registro; y allí nos quedamos esperando al resto de equipos mientras disfrutábamos de la excelente vista nocturna de Toledo, y Santi nos comentaba algunas anécdotas e historias de la propia zona, y de Toledo en general.
1 comentario:
Estupendo reportaje.
Una envidia para los que no pudimos asistir.
Otra vez será.
Gracias por hacernos partícipes indirectamente del evento.
Un saludo.
>fetiche<
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